Armando Guerra, Luis Aguilera, Rodney Álvarez, Yaritza Rodríguez -madre de Rodney- y Gesse |
El trabajador de Ferrominera Orinoco,
lleva cinco años en la cárcel, por un crimen
que no cometió. Exigimos su libertad.
que no cometió. Exigimos su libertad.
Laclase.info
Rodney Álvarez, es el nombre del trabajador de Ferrominera Orinoco, sobre cuyos hombros el gobierno de Nicolás Maduro ha dejado caer el peso de la cárcel, imputado por un crimen que no cometió. Hace dos semana aproximadamente, cumplió cinco años detenido por la presunta participación en el homicidio del también trabajador de FMO Renny Rojas, asesinado el 9 de junio de 2011 durante la realización de una asamblea en el portón de la empresa, cuando los trabajadores de esta factoría aspiraban constituir la comisión electoral para la renovación de las autoridades sindicales de Sintraferrominera.
Esta asamblea se efectuó a plena luz del día, de manera que gran parte de los asistentes vieron y así en infinidad de audiencias han declarado, que Héctor Maicán (miembro de la FBT) realizó los únicos tres disparos de los que dan fe, se consumaron ese día. Es esta la razón que angustia y preocupa a la gran masa laboral de FMO. ¿Cómo es posible que después de cinco años, sin demostrar la participación de Rodney Álvarez en este delito, no solo él siga detenido, sino que la investigación demora en señalar otros caminos, como los del autor del homicidio? ¿Será que para algunos es necesario mantener un rehén, así a todas luces este sea inocente?. Así, de torcida es la justicia en Venezuela.
Mientras tanto la familia de un trabajador ha sido destruida. Frank Rodríguez, tío de Rodney Álvarez nos comenta: “que sus sobrinos de 8, 7 y 6 años de edad, tiene cinco años sin ver a su padre. La última hija de seis años, apenas lo vio”. ¿Podrán estos niños acordarse de su padre? ¿No son estos los años más importantes de sus vidas y en los que se construyen los referentes paternos? ¿El retardo procesal, la negligencia de las autoridades y un gobierno que se decreta obrero, pueden estar de espaldas a la responsabilidad que dicta esta situación? ¿Cómo ocultar ante la masa laboral - lo que todos comentan- y no es otra cosa, que desde algún cenáculo partidista descargaron en el cuerpo de un inocente, una culpa que no es de él?
Y ante estas preguntas Frank Rodríguez se responde: “Se demostró que fue Héctor Maicán quien hizo los disparos, pero la jueza del Tribunal Décimo Segundo de Juicio del Área Metropolitana de Caracas no ha dictado veredicto”.
Rodney Álvarez no está solo
En el estado Lara, en programas de radio de temática laboral, se reporta la situación, del compañero de forma semanal. En distintas universidades, en sus salones de clases, se comenta y preguntan por la situación del trabajador de FMO. El dirigente nacional de los trabajadores petrolero, José Bodas, hizo referencia a la causa de Rodney en reciente entrevista de TV del periodista Bladimir Villegas. El abogado y defensor de los DDHH Luis Aguilera, del estado Aragua ha hecho causa común en la situación de Rodney Álvarez y dirigentes sindicales de Miranda, Guayana y del sector salud en Caracas, mantienen su campaña, asi como la corriente CCURA y el Núcleo Proletario.
Rodney Álvarez, es el nombre del trabajador de Ferrominera Orinoco, sobre cuyos hombros el gobierno de Nicolás Maduro ha dejado caer el peso de la cárcel, imputado por un crimen que no cometió. Hace dos semana aproximadamente, cumplió cinco años detenido por la presunta participación en el homicidio del también trabajador de FMO Renny Rojas, asesinado el 9 de junio de 2011 durante la realización de una asamblea en el portón de la empresa, cuando los trabajadores de esta factoría aspiraban constituir la comisión electoral para la renovación de las autoridades sindicales de Sintraferrominera.
Esta asamblea se efectuó a plena luz del día, de manera que gran parte de los asistentes vieron y así en infinidad de audiencias han declarado, que Héctor Maicán (miembro de la FBT) realizó los únicos tres disparos de los que dan fe, se consumaron ese día. Es esta la razón que angustia y preocupa a la gran masa laboral de FMO. ¿Cómo es posible que después de cinco años, sin demostrar la participación de Rodney Álvarez en este delito, no solo él siga detenido, sino que la investigación demora en señalar otros caminos, como los del autor del homicidio? ¿Será que para algunos es necesario mantener un rehén, así a todas luces este sea inocente?. Así, de torcida es la justicia en Venezuela.
Mientras tanto la familia de un trabajador ha sido destruida. Frank Rodríguez, tío de Rodney Álvarez nos comenta: “que sus sobrinos de 8, 7 y 6 años de edad, tiene cinco años sin ver a su padre. La última hija de seis años, apenas lo vio”. ¿Podrán estos niños acordarse de su padre? ¿No son estos los años más importantes de sus vidas y en los que se construyen los referentes paternos? ¿El retardo procesal, la negligencia de las autoridades y un gobierno que se decreta obrero, pueden estar de espaldas a la responsabilidad que dicta esta situación? ¿Cómo ocultar ante la masa laboral - lo que todos comentan- y no es otra cosa, que desde algún cenáculo partidista descargaron en el cuerpo de un inocente, una culpa que no es de él?
Y ante estas preguntas Frank Rodríguez se responde: “Se demostró que fue Héctor Maicán quien hizo los disparos, pero la jueza del Tribunal Décimo Segundo de Juicio del Área Metropolitana de Caracas no ha dictado veredicto”.
Rodney Álvarez no está solo
En el estado Lara, en programas de radio de temática laboral, se reporta la situación, del compañero de forma semanal. En distintas universidades, en sus salones de clases, se comenta y preguntan por la situación del trabajador de FMO. El dirigente nacional de los trabajadores petrolero, José Bodas, hizo referencia a la causa de Rodney en reciente entrevista de TV del periodista Bladimir Villegas. El abogado y defensor de los DDHH Luis Aguilera, del estado Aragua ha hecho causa común en la situación de Rodney Álvarez y dirigentes sindicales de Miranda, Guayana y del sector salud en Caracas, mantienen su campaña, asi como la corriente CCURA y el Núcleo Proletario.
Y lo más importante, los trabajadores de FMO, ante el peso de la crisis económica, los bajos salarios y el desabastecimiento que agobia a los trabajadores del país, no dejan de preguntar por la salud de Rodney Álvarez, el desamparo en el que están su familia, sus hijos y el qué hacer para contribuir con el núcleo familiar y por la exigencia de su libertad.
Próxima audiencia
El lunes 11 de julio es la próxima audiencia en el caso de Rodney, en los tribunales en Caracas. Además de que el mandato del gobierno es dejar caer el peso de la crisis sobre los hombros de los trabajadores, con sus miserables colas y salarios de hambre, la violación de los contratos y la suspensión a elecciones sindicales, el aumento en los servicios; en la resistencia, en nuestras luchas ante un gobierno que agoniza, debe estar presente la demanda por la libertad de este compañero de FMO.
Y así, como los trabajadores universitarios luchan y exigen por su aumento de salario, así como los eléctricos exigen la firma de un contrato vencido hace cinco años, así como los petroleros denuncian el fraude y exigen elecciones transparentes, libres y democráticas, así como en los hospitales de Guayana y de todo el país los trabajadores exigen medicamentos, así como las comunidades en distintos estados se levantan contra la imposición del hambre, los ferromineros, exigimos se respete nuestro derecho a elegir y a ser elegido y a dar curso a nuestro proceso sindical, también intervenido. Y rotundamente, exigimos por la libertad del compañero Rodney Álvarez. No hay pueblo vencido.
Y como dice el abogado Manuel Sarabria, “exigimos que se avoquen a se logre una sentencia absolutoria”.
Próxima audiencia
El lunes 11 de julio es la próxima audiencia en el caso de Rodney, en los tribunales en Caracas. Además de que el mandato del gobierno es dejar caer el peso de la crisis sobre los hombros de los trabajadores, con sus miserables colas y salarios de hambre, la violación de los contratos y la suspensión a elecciones sindicales, el aumento en los servicios; en la resistencia, en nuestras luchas ante un gobierno que agoniza, debe estar presente la demanda por la libertad de este compañero de FMO.
Y así, como los trabajadores universitarios luchan y exigen por su aumento de salario, así como los eléctricos exigen la firma de un contrato vencido hace cinco años, así como los petroleros denuncian el fraude y exigen elecciones transparentes, libres y democráticas, así como en los hospitales de Guayana y de todo el país los trabajadores exigen medicamentos, así como las comunidades en distintos estados se levantan contra la imposición del hambre, los ferromineros, exigimos se respete nuestro derecho a elegir y a ser elegido y a dar curso a nuestro proceso sindical, también intervenido. Y rotundamente, exigimos por la libertad del compañero Rodney Álvarez. No hay pueblo vencido.
Y como dice el abogado Manuel Sarabria, “exigimos que se avoquen a se logre una sentencia absolutoria”.
Una sola clase, una sola lucha.
Libertad ya para Rodney Álvarez.
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